Durante su intervención en la reunión anual del Institute of Internation, el presidente de BBVA, Francisco González, señaló que es necesario cambios en la regulación de manera de permitir a los bancos ofrecer a los clientes productos “más ajustados y baratos”, según publicó el diario El Mundo.
La reunión fue celebrada en Lima (Perú). Allí González reconoció la “dificil tarea del regulador”, e insistió sobre que “la mayoría de aspectos relacionados con la banca digital no están regulados”.
En su opinión, el nuevo marco regulatorio debe alcanzar “un balance que compagine el control – la necesidad de proteger a los consumidores a toda costa frente a potenciales perjuicios causados por la innovación financiera- con la posibilidad de que se beneficien de costes reducidos y mejoras para los consumidores”.
El presidente del banco destacó que los canales digitales de la entidad son utilizados actualmente por 13,9 millones de clientes, de los que 7,4 millones lo hacen a través de móvil. Además, la previsión es que en 2015 alcancen los 15 millones de clientes activos digitales y 8 millones de clientes activos móviles.
Por último, González aseguró que las nuevas empresas tecnológicas aparecidas en el ámbito de las finanzas (las denominadas fintech) todavía dependen de la infraestructura bancaria. Sin embargo, según algunos estudios estas compañías lograron atraer 13.000 millones en inversión en el primer semestre del año, frente a los 4.000 millones de 2013.
