El BCE avanza con la implementación del dinero electrónico, aunque aún se esperan definir aspectos reglamentarios que canalicen su funcionamiento en el Ecuador. Entrevista al gerente de la entidad, Mateo Villalba.
¿Cuál es la trascendencia del dinero electrónico para el sistema financiero ecuatoriano?
No es más que una herramienta tecnológica que está a nuestro alcance, con los avances de la era digital. Es una herramienta del ámbito monetario y que ha cumplido objetivos en otras partes del planeta.
El dinero electrónico, en el caso ecuatoriano, es muy distinto. ¿Qué tipo de características tiene?
En el mundo desarrollado, como Holanda o EE.UU., se ejecutaron experiencias de dinero electrónico para lograr eficiencia en las transacciones; es decir, hacerlo más rápido y con los menores costos. En cambio, en países del África, como Kenia o Tanzania, comenzó a crecer como una alternativa de inclusión económica. Ahí no había mayor penetración financiera y cuando llegó la telefonía celular, brindó una oportunidad brillante. Ecuador está en el medio y puede beneficiarse de dos objetivos.
¿Cuáles son esos objetivos?
Por un lado, el circuito comercial, la clase media, los negocios e incluso el sistema financiero pueden beneficiarse. Es decir, van a tener a disposición un medio de pago que ahorra tiempo, con muchísimos menores costos transaccionales. Desde el lado de la inclusión financiera es una oportunidad, ya que en Ecuador, el 40% de la PEA no tiene cuenta bancaria. Solo se necesita un celular, que no requiere ser un teléfono inteligente, ni siquiera debe tener Internet.
En tal contexto, ¿la sociedad ecuatoriana está preparada para manejar el dinero electrónico?
Yo diría que tiene la necesidad de tener a su disposición, mejores y mayores opciones de medios de pago, y en ese sentido, hay una oportunidad. Es decir, este proceso no solo es de construcción de la plataforma tecnológica, de la normativa y lo operacional que viene detrás, sino que también es un proceso de aprendizaje de la gente, de cómo lo utilizará. Es importante recalcar que el uso del dinero electrónico es un instrumento opcional.
¿Cuándo entrarán a operar los puntos de pago al público, para cargas y descargas?
No tenemos una fecha exacta, pero sabemos que hasta fines de año lo vamos a iniciar; todavía nos faltan ajustar detalles tecnológicos, como la interfaz o interconexión con CNT; con Movistar ya funcionó en el Campus Party, y una vez firmado el convenio con Claro, nos pondremos a trabajar. Una vez que tengamos integradas a las tres operadoras, vamos a desarrollar el segundo paso, que tiene que ver con los agentes del sistema, como pueden ser almacenes, farmacias, supermercados, que puedan dar el servicio para cargar y descargar el dinero electrónico.
Este contenido ha sido publicado originalmente por Revista Líderes