Myriam Cosio Robles no se imaginaba trabajando en una startup mientras cursaba Ingeniería en Sistemas Electrónicos y Eléctricos; ni tampoco cuando logró su Maestría en Administración de Negocios, y entró por la puerta grande en el ámbito corporativo, en American Express.
Hoy es Chief External Affairs Officer de Clip, el tercer unicornio mexicano; la empresa que dio acceso masivo a herramientas financieras a pymes y comercios en la segunda gran economía regional, en ese mismo país en el que imperan las transacciones en cash. Basta decir que 2 de cada 3 comercios nuevos cuentan con Clip, para dimensionar la penetración de la empresa en el país y la reconfiguración del ecosistema de pagos que logró.
¿Cómo aterrizaste en el mundo fintech?
Myriam Cosio Robles: Por mi rol corporativo conocí a Adolfo Babatz, el fundador de Clip; y mi ex jefe, Lorenzo Soriano, me recomendó para que me incorpore a la empresa. Hay líderes y mentores que además son ángeles, te tienen en mente y te ayudan a impulsar tu carrera y tomar oportunidades que tú ni siquiera sabías que existían.
¿Sentiste el salto desde la estabilidad corporativa al vértigo emprendedor?
Myriam Cosio Robles: Cuando dejé AMEX para trabajar en Clip, estaba rodeada de incertidumbre; éramos 20 empleados que hacíamos de todo: empacar productos, atender llamadas, definir estrategias comerciales, etc. No había garantía de éxito. Pero mi familia me dio su apoyo en esa transición.
Allí supe que tomar esa decisión difícil era un poderoso ejemplo para mis hijos, porque ese cambio me llenó de satisfacción y crecimiento profesional.
¿Cómo defines la misión de Clip?
Myriam Cosio Robles: La misión de Clip es “We make ideas happen”.
Queremos ser un facilitador para que los emprendedores tengan un aliado que los ayude a que su idea suceda, haciendo posible la aceptación de pagos digitales en sus negocios; y además brindamos recargas telefónicas, gestión de catálogos e inventarios; en general, ofrecemos herramientas para mejorar la administración e incrementar la rentabilidad.
¿Y tu misión en la empresa?
Myriam Cosio Robles: External Affairs es el vaso comunicante hacia el exterior. Buscamos anticiparnos a los riesgos emergentes y promover los temas de valor estratégico y reputacional para el negocio.
Con mi equipo, tenemos la misión de incidir de manera positiva en políticas públicas que nos permitan mejorar la cobertura de la red de pagos en México. Buscamos modificar las condiciones para lograr una competencia más justa en beneficio de los usuarios de servicios financieros. Por ejemplo: incrementar el uso de medios de pago digitales; disminuir el uso de efectivo; acceso para todos los comercios de México a herramientas que les ayuden a incrementar ventas y administrar mejor su negocio; y promover la inclusión financiera en todo el país. Esta agenda nos apasiona, y es parte de lo que hace de Clip una empresa extraordinaria.
¿Cómo ves el panorama fintech en México?
MCR: Es el segundo país de la región (detrás de Ecuador), donde la población más usa el efectivo y muestra resistencia a abandonarlo. De acuerdo con datos de la ENIF 2021, el 95% de las compras en México menores a 30 dólares son en efectivo; y más de 9 millones de comercios aceptan solo pagos cash. Todos los jugadores del ecosistema financiero tenemos una enorme oportunidad de trabajar en conjunto para lograr una mayor penetración de otros métodos de pago digitales.
¿Hay alguna tecnología o estrategia clave para el futuro del sector financiero de México?
MCR: Clip -y los agregadores de pagos-, han desarrollado soluciones basadas en tecnología innovadora, para llegar a los segmentos de población previamente desatendida.
“Pero, para la habilitación de nuevos medios de pago, dependemos de la tecnología habilitada en la red de pagos desarrollada por el sistema financiero tradicional, que presenta un rezago
significativo comparada con otros mercados en la región y el mundo”.
La baja penetración de los NFC (pagos sin contacto), que en México representan menos del 3%, cuando en Guatemala tienen 70% de penetración. Los pagos QR no han logrado relevancia por falta de adopción de estándares internacionales; o Tap to Phone (pago de teléfono a teléfono), no ha podido ser implementado. Ni tampoco los pagos biométricos que simplifican significativamente el proceso, eliminando barreras físicas como la emisión de plásticos o la utilización de lectores de pago.
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¿Cómo impactaron los servicios de Clip en la economía pyme?
MCR: Clip es la primera gran historia de éxito de inclusión financiera del país y la primera gran historia de disrupción tecnológica en México.
Nuestra responsabilidad como líderes en el sector de pagos es seguir creando espacios que impulsen la educación financiera. En 11 años, Clip ha logrado ser el mayor adquirente de México por número de comercios, cubriendo todas las regiones del país. El 85% de nuestros comercios solo aceptaban efectivo antes de tener Clip.
¿La propuesta de valor de Clip incluye a los comercios más pequeños?
MCR: En 5 minutos se puede comprar el dispositivo, bajar la App y comenzar a realizar transacciones; (la obtención de una terminal bancaria toma más de 3 meses y está sujeta a rentas mensuales y mínimos de facturación).
Además, con una sola terminal de Clip se pueden aceptar todas las tarjetas de crédito, débito y vales, además de hacer operaciones a MSI.
¿Qué perfiles laborales están demandando las fintech?
MCR: Suelen demandar un ritmo acelerado de aprendizaje, una enorme capacidad de adaptación y comprensión de temas tecnológicos novedosos. Además, las fintech en México usualmente son startups; hay un dicho que dice que el tiempo trabajado en una startup se cuenta como “años perro”, por la intensidad que implica desarrollarse en este sector.
Creo que la gratificación profesional es proporcional a lo que se espera de nosotros. Hay que ser una persona disciplinada y estar orientada a los resultados, estar dispuesta a encontrar respuestas novedosas a problemas que no se han podido resolver antes; ser resiliente ante los retos y el fracaso y tener la mejor actitud.
¿Y en el caso de Clip?
MCR: Nos hemos enfrentado al reto de llegar a profesionales de carreras STEM, y particularmente, mujeres, para atraer perfiles diversos que nos permitan enriquecer la cultura laboral y la diversidad de puntos de vista. En esa diversidad está la riqueza, la fortaleza y la innovación; como empresa hicimos esfuerzos adicionales por identificar talento mexicano, especialmente de mujeres.
¿Qué desafío tienen las instituciones financieras en materia de género, inclusión, responsabilidad social?
MCR: El sector financiero es uno de los menos diverso a nivel profesional. Por ejemplo: sabemos que las mujeres en cargos directivos en el sector representan sólo el 16% del total, y que ocupan sólo el 26% de los mandos medios en estas entidades.
Además, integran menos del 9% de todos los Consejos de Administración. La falta de inclusión es transversal y se encuentra en otros indicadores como la diversidad sexual y el origen socioeconómico de quienes nos desempeñamos en esta industria. En Clip estamos conscientes de esa deuda y por eso hemos adoptado medidas que nos ayuden a cerrar las brechas. Siento que tengo un enorme compromiso, y una enorme oportunidad también, como mujer con una posición de liderazgo.
Las personas que trabajan en Clip son tan diversas como las personas y los comercios con los que trabajamos. Tienen acceso a las mismas oportunidades de desarrollo profesional y personal, formación y remuneración, en un espacio seguro y respetuoso, libre de discriminación y acoso. Desde el reclutamiento, si las personas cumplen con el Clipper profile, no importa el género, orientación sexual, edad, identidad, ni otro aspecto que pueda ser objeto de discriminación.
¿Tienen planes de expandirse hacia otros mercados?
MCR: El mercado mexicano representa una oportunidad suficientemente grande como para concentrarnos en éste; pero por supuesto es algo que estaremos revisando cuando las condiciones sean adecuadas.
¿Puedes compartir algo que te haya impactado o sorprendido
trabajando en el mundo fintech, que ni siquiera imaginabas en tu etapa de estudiante?
Creo que lo que más me sorprendió, y es afín en cualquier startup, es la libertad de definición y acción. No depender de un tercero que te diga qué hacer y cómo hacerlo, sino ser quien define, ejecuta, se equivoca, corrige; y, en el camino, va capacitando a otros para hacer lo mismo. Y eso no solo sucedió en los primeros años de Clip, sigue siendo así en todas las áreas y en todos los niveles. Ahora entiendo que es parte de la cultura implícita de las startups, de ahí la importancia de ser resiliente, ya que la única constante es el cambio y hay que estar preparado para enfrentarlo, darle la bienvenida y adoptarlo como un reto más a superar. Me sorprendo de todo lo que hemos logrado, es increíble y súper gratificante.
¡Dejar American Express para entrar a Clip fue la mejor decisión profesional que he tomado!